Crítica a la asignatura

 

Una vez finalizada la asignatura de Gabinetes de Comunicación me gustaría hacer un balance de la asignatura. 

No hay duda en que lo más enriquecedor de estas clases han sido las visitas que hemos tenido los jueves. Es una forma de acercar a los estudiantes a la realidad de la profesión. Para mí siempre me ha dotado de más positivismo, ya que en la carrera únicamente nos hablan de lo mal que está el periodismo y lo difícil que es conseguir trabajo. Sin embargo, la gran mayoría de los invitados nos han animado a comenzar en el mundo de la comunicación y han demostrado que podemos conseguir dedicarnos a esto. 

La charla más enriquecedora bajo mi punto de vista fue la de Martín Caparrós. En ella aprendí mucho sobre latinoamérica y sobre las relaciones que nos une a España con estos países. Otros invitados como Carlos Pecker también nos marcó a los alumnos, sobre todo por su forma de ser. Pude descubrir quién estaba detrás de las imágenes que veía de pequeña con mis padres, cuando ponían en la televisión el programa sobre la Ruta Quetzal. También poder escuchar a uno de nuestros compañeros de clase hablar sobre el proyecto en el que está envuelto es destacable. Poder conocer cómo alguien de nuestra misma edad forma parte de un proyecto tan innovador. Mercedes Soriano, otra de las invitadas que nos pudo aportar gran valor con su charla. Mostró su gran pasión por su trabajo y su interés por aprender. No pudo mostrar cómo funciona la comunicación desde su punto de vista y aprendí que “La gente confunde comunicación con marketing”. 

Todos y cada uno de los invitados de perfiles completamente diferentes entre sí nos ha aportado gran valor a cada uno de nosotros. 

Siguiendo con la crítica, es una asignatura en la que se aprende de una forma diferente a la tradicional (power points-apuntes-memorizar-examen-olvidar). Sería algo hipócrita decir que he notado la falta de clases teóricas porque desde mi punto de vista esa no es la forma de aprender. La carrera en general  está desactualizada y es en gran parte por la gran distancia que hay entre el alumnado y los profesionales que ya están en el mundo laboral. Por eso considero que esta asignatura sí nos ha acercado más a la realidad.

Además es una asignatura asequible ya que no tiene examen y gracias a las prácticas puedes aprender y sacar la asignatura. La asistencia obligatoria condiciona bastante la nota. En mi caso no me ha sido posible asistir al 100% de las clases e imagino que eso repercutirá. Aún así entiendo que por la modalidad que el profesor tiene de impartir la asignatura, no es compatible no asistir a dichas clases. 

Por lo general estoy bastante contenta con la asignatura, he aprendido mucho sobre comunicación y comunicación corporativa que estando en tercero de carrera ya era hora.